¿Cómo diseñar circuitos turísticos apropiados y efectivos de la mano de actores clave en las cadenas de valor del turismo de las 4 regiones priorizadas, los cuales tengan como médula la gastronomía regional?
Parafraseando a la tesista Nathaly Morán, el turismo es considerado un eje dinamizador de la economía regional y local, gracias al beneficio compartido que trae, tanto para las comunidades habitantes generando entradas y movimiento económico en la zona, así como para el visitante el cual se beneficia del conjunto de las experiencias físicas y sensoriales ofrecidas. La pandemia de COVID-19 fue de alto impacto a nivel mundial y Guatemala no fue la excepción, esta provocó una disminución del 72% en las llegadas de turistas internacionales respecto del 2019, dando como resultado que en tan solo un año se alcanzaran los niveles más bajos del turismo en los últimos 30 años; este contexto desencadenó cambios socioeconómicos mundiales y locales que reclaman nuevas modalidades turísticas donde se priorice la sostenibilidad y se ponga en valor lo local como vehículo de experiencias. Fortalecer este amplio sector se presenta entonces como un propósito de vital importancia para la economía del país y sus habitantes.
Para junio de 2024 se espera haber aportado en el fortalecimiento de la oferta turística del país, por medio de la co-creación y validación de circuitos turísticos centrados en gastronomía regional propia de cada una de las 4 regiones priorizadas para el estudio, siendo estas: Región central (Guatemala, Chimaltenango y Sacatepéquez), Las Verapaces (Alta y Baja Verapaz), Altiplano y Zona del Pacífico.